La aromaterapia es una terapia alternativa que emplea el uso de los aceites esenciales para fines terapéuticos para el bienestar físico, mental y emocional.
Los aceites esenciales, son sustancias volátiles que se extraen de las partes secretoras de las plantas; como los pétalos, las hojas, raíces, semillas, tallos, cortezas, etc. Ellos son el mecanismo de defensa de las plantas y por naturaleza tienen propiedades antibacterianas, antivirales, regeneradoras, calmantes, edificantes, etc. y nosotros podemos aprovechar estas propiedades para mejorar nuestra salud y la de nuestros hijos de forma integral.
Para ayudar a nuestros hijos a regularse emocionamente podemos aplicarles aceites esenciales calmantes, relajantes, equilibradores emocionales, alentadores, etc. en las zonas de pulso como detrás de las orejas, en las muñecas y darle que a huele un poco del mismo con respiraciones lentas y conscientes. Gracias al sistema del olfato; el más primitivo de nuestros 5 sentidos y el que tiene una estrecha relación con nuestro cerebro, podemos cambiar de estado de ánimo y por ende el comportamiento.
Esto se logra porque al inhalar un aceite esencial, éste llega a estimular diferentes partes del cerebro y en especial a la amígdala cerebral; donde se almacenan todos nuestros recuerdos, emociones y también la conducta.
Entonces, podemos ayudar a nuestros hijos con este método alternativo: la aromaterapia; ayudándolos en el manejo de sus emociones y para ello usaremos técnicas sencillas y efectivas como: rutinas desde la mañana con aceites esenciales como el limón, naranja para tener un buen estado de ánimo y energía poco después de que se despierten.
Los niños en edad escolar pueden beneficiarse de la aromaterapia para estimular la concentración y bajar niveles de ansiedad frente a un examen, una exposición o reducir la distracción mientras hacen sus deberes y a su vez estimulando su sistema inmune; para estos fines se puede usar el aceite esencial de hierbabuena, limón, romero.
Podemos abordar también estados emocionales como la ira, el miedo, la tristeza, la vergüenza, nerviosismo, ansiedad con aceites esenciales para proyectar efectos positivos en los niños y corregir conductas inadecuadas que se desencadenan a causa de estas emociones. Para apoyar a niños rabiosos y desafiantes podemos hacer una mezcla con el aceite esencial de Vetiver, Lavanda y Bergamota y aplicarlo de forma tópica a lo largo de la columna vertebral.
En caso de desbordes emocionales o el sobrecansancio; podemos recurrir a mezclas específicas para calmarlos e incluso nosotras como mamis podemos usar aceites relajantes, calmantes en nuestra ropa y darles un abrazo, de esta forma somos sus difusores pasivos con el poder de la maternidad; es importante, que nos vean y estemos reguladas para apoyarlos a transitar sus emociones y transformarlas. El contacto físico con mamá o papá con un abrazo, un masaje en la planta de los pies, un masaje en la espalda con aceites esenciales hace la aromaterapia sea una terapia que a los niños les gusta; huele rico, es agradable, efectiva, actúa rápido y aporta bienestar emocional.
Con cariño;
Dayana Mendoza
Certif. Espec. en Aceites Esenciales
Certif. en Aromaterapia 101
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